En una de los primeras entradas de este blog se publicó una ruta que unía los municipios de San Fernando de Henares y Torrejón de Ardoz. Pues bien, retomamos esa ruta para continuarla hasta el municipio de Torres de la Alameda.
Partimos del punto donde finalizamos aquella vez, esto es, una rotonda a la salida de Torrejón junto a un puente que pasa por encima del río Henares (1). Nosotros optaremos esta vez, y sin que sirva de precedente, por una carretera de aspecto nuevo y que conduce directamente al Cementerio de Torrejón de Ardoz. Y es que hay una alternativa, que es un camino que dicurre junto al río que sin embargo es poco recomendable, puesto que está lleno de abrojos y los pinchazos son muy comunes en ese tramo.
Una vez hayamos llegado al Cementerio (2) lo bordeamos desde su parte izquierda por un camino que allí nace. En en momento en que empieza a descender se bifurca, y nosotros optaremos por girar a la izquierda. A partir de ahí comienza un agradable paseo en el que
seremos testigos desde la altura del discurrir de las aguas del Henares, que queda a nuestra derecha (3). Al final de este tramo de subidas y bajadas hay que tener cuidado, puesto que hay una zona con un pequeño socabón (4) que nos podría hacer caer desde el desfiladero por el que circulamos. Poco despues nos encontraremos con una granja a nuestra derecha y de nuevo encontraremos una bifurcación. El sentido común nos dirá que tendremos que seguir el camino que acompaña al río (5).
seremos testigos desde la altura del discurrir de las aguas del Henares, que queda a nuestra derecha (3). Al final de este tramo de subidas y bajadas hay que tener cuidado, puesto que hay una zona con un pequeño socabón (4) que nos podría hacer caer desde el desfiladero por el que circulamos. Poco despues nos encontraremos con una granja a nuestra derecha y de nuevo encontraremos una bifurcación. El sentido común nos dirá que tendremos que seguir el camino que acompaña al río (5).
A partir de ahí rodaremos por un tramo con dos rectas descadadas, eso sí, con muchas piedras y resaltos, entretenido para aquellos a los que les guste "trastear" encima de la bicicleta. A unos cientos de metros encontraremos un caserío (6) que bordearemos. De nuevo una bifurcación y esta vez giramos a la derecha. Como referencia veremos a los pocos metros un puente de piedra que pasa por encima del río Henares (7). Pasaremos por encima de él, dejando atrás a nuestro sinuoso y caudaloso compañero para ir poco a poco alcanzando terrenos más secos.
Antes habremos girado a la derecha en una bifurcación al final del sendero del puente. Como referencia veremos a pocos metros una gran parcela donde los caballos campan a sus anchas (8). Es momento de cruzar la M203 por un paso subterráneo (9) y encontrarnos de frente un sendero muy definido y ancho. Será ahora nuestro compañero de viaje, prácticamente hasta Torres de la Alameda. Optaremos siempre por este camino, transitado de vez en cuando por camiones que en verano suelen dejar un incómodo reguero de polvo para nosotros los ciclistas. Iremos dejando a nuestra izquierda el Cerro de El Viso (10) que, por cierto, tendrá su propio capítulo en próximas actualizaciones.
A partir de este punto, nos encontraremos únicamente con dos rampas con algo de desnivel, sobre todo la segunda (11), donde despuntarán las piernas más alegres. Una vez ascendido el segundo tramo, veremos ya a lo lejos el municipio de Torres de la Alameda. Únicamente nos resta pasar por un puente por encima de la vía del AVE hacia Barcelona (12), y dejarnos caer hasta encontrarnos la M300 (13). Como siempre miramos a izquierda y a derecha antes de cruzarla, para entonces dirigirnos por una carretera poco transitada hacia Torres de la Alameda (14) en un tramo, eso sí, que poco a poco va picando hacia arriba hasta que llegamos a nuestro destino final.
Adjunto ahora unas fotos para que os hagais a la idea del camino que hemos recorrido.
Este es el paseo (3) que recorremos una vez dejamos atrás el cementerio de Torrejón de Ardoz. A nuestra derecha, siempre el río Henares y de fondo, el Cerro de El Viso.
Esta es la parcela donde los caballos campan a sus anchas (8). Dependiendo de la estación, les veremos o no pastando.
Y aquí el Cerro del Viso, que iremos dejando a
nuestra derecha (10) conforme hayamos pasado el túnel por debajo de la M300 y vayamos en dirección a Torres de la Alameda.
Una vez terminen las rampas más duras vendrá un tramo de subidas y bajadas hasta que nos crucemos con la carretera M220 (6). Como siempre, parar y mirar a ambos lados de la carretera antes de cruzar y seguir por el camino de tierra.
